Tradicional POSADA NAVIDEÑA 2021 Teotitlán del Valle Oaxaca - (Galería Fotográfica)

En el pueblo zapoteca de Teotitlán del Valle, las posadas se festejan de manera tradicional, resaltando en todo momento las costumbres y tradiciones de la comunidad así como la ayuda mutua entre vecinos y allegados.

Los preparativos inician desde la madrugada en casa de los anfitriones a donde llegan los familiares más cercanos llevando un presente (pan o azúcar) como se acostumbra por tradición. Las mujeres apoyan en la elaboración de alimentos mientras que los hombres ayudan en la limpieza y decoración del lugar.

Toda la casa se llena de alegría, las risas y conversaciones en zapoteco armonizan el lugar. Las cocineras van antojando de a poco a los invitados con el exquisito olor a carne de puerco, tlayudas, tamales y tejate, alimentos que se elaboran desde que empieza salir el sol y se reparten a todos los presentes.

A cierta hora del día, una comitiva de familiares de los gastantes van por velas de concha que serán usadas por la tarde. Llegado el momento, los sacristanes, que ya están en la casa de la fiesta, comienzan a decorar el altar donde serán colocadas las imágenes religiosas, alistan también dos collares de “flor de cacao” que se colocaran en el cuello de los peregrinos. Por la tarde, la banda de música, anfitriones, invitados y los comisionados del templo se dirigen a la casa donde la noche anterior se realizó el gasto, para recoger a los peregrinos y regresar en procesión con la banda de música y el pueblo a la casa en donde se realizará la posada de este día, alumbran el camino un sinfín de ceras de concha.

Ya de regreso a la casa que hoy está de fiesta, se toca las piezas musicales para pedir posada, posteriormente, las imágenes se colocan en el altar y se realiza un rosario, con ello la parte católica de esta celebración se ha cumplido.

A los asistentes se les ofrecen antojitos que la familia ha preparado. Más tarde, se sirven las tazas de chocolate y pan resobado o marquesote para que todos disfruten mientras la banda de música entona bellas piezas musicales.

Al día siguiente y con los primeros rayos del sol, los invitados llegan con una ofrenda de flores, pan, fruta, mezcal o una piñata que se entregan como guelaguetza al pie del altar y frente a las imágenes de María y José.

El chocolate, atole con espuma, pan, higaditos y tlayudas se sirven como desayuno. El huehuete hace entrega de un ramo de poleo con la flor de niño y hoja de pino a cada uno de los presentes y uno a uno se les invita a bailar los sones y jarabes tradicionales de Teotitlán del Valle.

Durante esta alegre convivencia se reparte el mezcal que es degustado después de hacer una reverencia como permiso y respeto. Para concluir con tan ameno baile, se deja escuchar el Jarabe del Valle y los anfitriones regalan dulces y frutas a todos los participantes.

Antes de que los nuevos gastantes lleguen a recoger a los peregrinos se realiza la quiebra de piñatas, misma que se acompaña con sones navideños. Llegada la hora de la comida se reparte el tradicional mole y se espera a que caiga la noche para despedir con gusto y alegría a María y José.